La casona donde se encuentra el restaurante fue construida en 1901 y estuvo habitada desde esa época por monjas de la Tercera Orden Franciscana. A mediados del siglo XX fue adquirida por la devota Doña Pepita Nucete, quien la convirtió en punto de referencia obligado para turistas y merideños, al tener uno de los pesebres mas grandes y hermosos de la ciudad de Mérida.
En 1998 la familia Duarte adquiere la casona para convertirla en una Abadía gastronómica, santuario de paz y tranquilidad. Durante su remodelación se encuentran reliquias enterradas como sotanas y reclinatorios, además de botellas y vasijas de más de 100 años de antigüedad.
Nuestros ambientes están llenos de magia y arte: La Terraza San Francisco, El Jardín “El Nombre de la Rosa”, las Catacumbas Café Lounge, la Barra de la Monja y la Agencia de Viajes Abadía Tours, con las mejores opciones para descubrir Venezuela y el mundo.
La Abadía es magia, misterio, encanto y leyendas… donde se habla de fantasmas, morocotas enterradas y una presencia espiritual que acompaña a nuestros visitantes. Sea usted bienvenido a este místico lugar y manténganse alerta, quizás las morocotas sean para usted…
Peregrina con nosotros…
Nuestro restaurante le ofrece cuatro ambientes, cada uno decorado y pensado en el disfrute y relax de la clientela
La Terraza de San Francisco
El Jardin El Nombre de la Rosa
Las Catacumbas Cafe Lounge